El Barça se hizo gigante frente al Valencia (6-0) en el Estadi Johan Cruyff

El FC Barcelona ha protagonizado una noche inolvidable en el Estadi Johan Cruyff, donde ha vapuleado al Valencia CF por un abrumador 6-0 en la jornada 4 de La Liga 2025-26. Bajo la batuta de Hansi Flick, los culés regresaron de la ventana internacional con una exhibición de fútbol total: posesión letal, pressing asfixiante y un arsenal ofensivo que desmanteló a un Valencia desdibujado. Con esta victoria, el Barça suma 10 puntos y asciende al segundo puesto, a un solo punto del líder, mientras que los ché se desploman a la decimoquinta plaza con apenas cuatro unidades, profundizando la crisis de Carlos Corberán.

El encuentro, ante 5.862 aficionados en un estadio que bullía de expectación, arrancó con un emotivo minuto de silencio. Desde el saque inicial, Barcelona dictó el ritmo con un 68% de posesión y un high press que estranguló cualquier atisbo de juego visitante. La zaga valencianista, replegada en un 5-4-1 ultradefensivo, no tuvo respuestas ante el dinamismo del tridente formado por Fermín López, Ferran Torres y Marcus Rashford, en su estreno como titular en esta configuración. El inglés, con su velocidad endiablada, fue un puñal constante por la banda izquierda.

El primer zarpazo llegó en el minuto 29: Fermín López, el canterano en estado de gracia, se elevó como un felino para cabecear un centro milimétrico de Roony Bardghji desde la derecha. El doblete de Fermín se completaría más tarde.

El descanso llegó, pero en el 54, un Raphinha recién entrado en el partido, ponía el 2-0. Así durante toda la segunda parte, que fue un monólogo culé. Tres minutos después, en el 56, el onubense Fermín –MVP esta noche– completó su doblete con un disparo cruzado y colocado tras una pared exquisita con Ferran Torres, quien filtró un pase quirúrgico entre líneas.

El festival continuó en el 65: Raphinha, insaciable, redondeó su noche con un remate de primera desde el corazón del área, culminando una jugada a una pared que inició Casadó y que Rashford devolvió con clase. Finalmente, Lewandowski, selló su propio doblete en el 74 y 86, añadiendo un doblete a su casillero, después de un inicio tímido de temporada.

El Barcelona, con 20 disparos totales y solo dos encajados, exhibió una defensa infranqueable: Eric García y Pau Cubarsí fueron titanes, mientras que Joan García vivió una velada plácida.

El Valencia, en cambio, fue un espejismo. Su mediocampo, liderado por un apagado Javi Guerra, generó un solo tiro a puerta en 90 minutos. Los errores en la transición –como el que propició el tercero– y la falta de ideas ofensivas expusieron las fisuras de un equipo que acumula cuatro jornadas sin un triunfo rotundo. Corberán, visiblemente frustrado, vio cómo su plan conservador se desmoronó ante la intensidad culé.

Marc Bernal volvió a sentirse futbolista, regalando además una asistencia a Lewandowski, y volviendo 1 año después de su fatídica lesión.

Con el debut en Champions ante el Newcastle el 19 de septiembre, el Barça proyecta una ilusión renovada. El Valencia, hundido en el pozo, urge una revolución para huir del abismo. Un 6-0 que evoca las noches mágicas del Barça y que quedará en el recuerdo por disputarse en el Estadi Johan Cruyff.