El Barça puede, y debe, soñar en grande ante el Borussia Dortmund

El Borussia Dortmund será el próximo obstáculo en el camino del Barça hacia la gloria europea. Los culés se medirán al equipo alemán en una eliminatoria a doble partido, con la ida programada para el 9 de abril de 2025 en el Estadi Olímpic Lluís Companys y la vuelta fijada para el 15 de abril de 2025 en el imponente Signal Iduna Park. Este cruce no solo enfrenta a dos clubes históricos, sino que también reaviva un duelo reciente de la fase de grupos de esta misma temporada, cuando el Barça se impuso por 2-3 en tierras germanas. Aquel precedente añade un matiz especial a esta batalla por un lugar en las semifinales.

El Borussia Dortmund llega a este momento de la temporada en un estado de forma que combina altibajos con destellos de brillantez. En la Bundesliga, el equipo no atraviesa su mejor campaña: tras un inicio titubeante, se encuentran en la décima posición, a siete puntos de los puestos de Champions League. La destitución de Nuri Sahin a principios de año y la llegada de Niko Kovac al banquillo han traído un cambio de rumbo, aunque los resultados aún no son consistentes. Sin embargo, en Europa, el Dortmund ha mostrado otra cara. Su clasificación a cuartos tras eliminar al Lille en octavos de final (3-2 en el global, con un 2-1 en la vuelta en Francia el 12 de marzo) demuestra que el equipo tiene capacidad para brillar en las grandes citas. Jugadores como Serhou Guirassy, líder goleador de la Champions con 10 tantos, y el explosivo Karim Adeyemi son las principales armas ofensivas de un equipo que, pese a las lesiones y la irregularidad, sigue siendo letal al contragolpe.

Para el FC Barcelona, el panorama es mucho más alentador. Bajo la dirección de Hansi Flick, el equipo ha encontrado un equilibrio notable entre veteranía y juventud, consolidándose como líder de LaLiga y mostrando un fútbol sólido en Europa. La fase de grupos, aunque con algún tropiezo, dejó patente su potencial, y la victoria sobre el Dortmund en diciembre de 2024 (2-3 en el Signal Iduna Park) es una prueba de que los culés saben cómo desarmar a este rival. Robert Lewandowski, con su instinto goleador intacto, y Raphinha, en un estado de forma estelar, forman una dupla temida por cualquier defensa. A ellos se suma Lamine Yamal, la joya de 17 años que ya ha hecho historia como el jugador más joven en marcar y asistir en un mismo partido de Champions. Este tridente, apoyado por un centro del campo liderado por Pedri y Frenkie de Jong, convierte al Barça en un contendiente formidable.

El Dortmund no será un rival sencillo. Su estilo intenso, basado en la presión alta y las transiciones rápidas, puede poner en aprietos a cualquier equipo, y el “Muro Amarillo” del Signal Iduna Park es un factor intimidante que suele impulsar a los alemanes en casa. Sin embargo, las fisuras en su juego son evidentes: la falta de regularidad en liga y las bajas por lesión podrían limitar su capacidad para mantener el ritmo durante 180 minutos. En contraste, el Barcelona llega con una plantilla más profunda, un sistema bien engrasado y la confianza de haber vencido al Dortmund en su propio estadio hace apenas unos meses.

Es por ello que el FC Barcelona tiene todas las herramientas para superar esta eliminatoria. La experiencia de Flick en competiciones europeas, el talento desbordante de sus atacantes y la solidez defensiva que han mostrado en esta temporada son argumentos de peso. Si logran imponer su juego en la ida y resistir la presión en Dortmund, el Barça debería avanzar a semifinales con relativa comodidad. Este equipo tiene hambre de títulos y un ADN competitivo que lo hace favorito ante un Dortmund valiente pero vulnerable. La eliminatoria está al alcance de los culés, y el optimismo está más que justificado: el Barcelona puede, y debe, soñar en grande en esta Champions.